AURELIO HERREROS, cronista del Santander de los años 40 y 50

Desde el 1 de septiembre de 1946 (y hasta enero de 1955) va informando  a Eulalio Ferrer (en el exilio, en México) de las novedades y los cambios (“arquitecto epistolar de este nuevo Santander”- le designa Eulalio):

En sus cartas, el maestro le iba contando al antiguo alumno cómo crecía y se desarrollaba la ciudad de Santander ante sus ojos en sus paseos…

CÓMO SE IBA HACIENDO EL SANTANDER DE LOS AÑOS 40 Y 50 (Y CÓMO ES AHORA)

“La ingente mole sobre [la] que (sic) cabalgaban las ancianas calles de R. [Rúa] Mayor y R. [Rúa] Menor ha sido rebajada en su mayor parte, y muy pronto lo será en total, dejando su suelo a nivel con Atarazanas y el Muelle (…).

Conservarán la altura que tuvieron, la Cuesta del Hospital y el terreno sobre el que se asienta la Catedral (…), a la que se ascenderá por escalinatas. 

La calle de Atarazanas, que gana una exagerada anchura, asfaltada, luce, en toda su extensión, edificios de bella traza, cuya altura fluctúa entre los 5 y 7 pisos. La de la Compañía, también muy espaciosa, se corre por el Oeste a lo largo de la del Peso, y no para hasta el Ayuntamiento; y por el Este, en vez de desembocar en la del Arcillero, sigue, conservando la línea recta, a morir junto a la de H. [Hernán] Cortés. Las de Franco y la Blanca, (…) han ganado algo en anchura, pero conservando su característica: paseo de invierno y centro comercial. La de la Blanca termina por el Este en una amplia plaza, circundada de suntuosos edificios oficiales (Delegación de Hacienda, Gobierno Civil, Gobierno Militar y otro que aún no está designado), todos con soportales que darán cobijo, en días lluviosos, a quienes deseen utilizarlos para guarecerse o pasear. 

La Cuesta del Hospital quedó tan elevada que, para ganarla, se precisa subir una escalera de 13 peldaños; y en oposición a esto, en el extremo opuesto, lindante con la citada Casa municipal, se rellenó en tal cuantía que, para entrar en lo que fue papelería “La Ideal” y en “El Sepi”, hay que bajar una grada de 4 escalones (…) Se consiguió eliminar por completo las inundaciones que, se producían en esos lugares con harta frecuencia. 

Fue rebajado el terreno que ocupó la Plaza Vieja y la Calle de la Compañía, y parte alta de la del Peso, y hoy, para entrar en la iglesia de aquel nombre, al igual que en la calle de Sta. Clara, se necesita subir una escalera de 20 peldaños.

Octubre 8 del 48 [8 de octubre de 1948]

“…Circulamos ya por dos calles completamente llanas que conducen desde Atarazanas al muelle de Maliaño, por terrenos desmontados de lo que fueron calles de Gibaja, Ruamayor y Ruamenor”.

Marzo 30 del 49 [30 de marzo de 1949]

“Además de las edificaciones que abanzan (sic) con lentitud desesperante, ahora les llegó el turno de reforma a las viejas Alamedas. La 1ª ha perdido a todo lo largo una ancha faja de terreno para ensanchar con ella la calle que tenía a su izquierda, a fin de que alcance tanta anchura como el trozo que nace en Puertochico (…) se ha prolongado la calle de Vargas hasta Cuatro Caminos, con el objeto de descongestionar la calle San Fernando (…) El espacio existente entre las dos filas de Álamos queda destinado a parque de niños, para cuyo fin se le pavimentará convenientemente, y se la está adornando con algunos jardinillos”.

agosto 7 del 49 [7 de agosto de 1949]

“…sobre la transformación que están sufriendo sus dos Alamedas. La 1ª ha cedido gran parte de su anchura a la calzada por donde ruedan los tranvías, a cambio de la otra que existía en la parte opues[ta] (sic), arrimada a las casas, la cual se ha unido al terreno restante, formando el todo una planicie cubierta en su totalidad por baldosa de cemento, con destino a tránsito peonil y a esparcimiento público.

(…) se está construyendo una bonita pérgola, compuesta de 15 columnas cilíndricas de piedra blanca, bastante espaciadas entre sí, y unidas cada una con su inmediata por bigas (sic) de cemento, cubiertas de artísticas armaduras de madera que servirán de asiento a una gran suma de rosales trepadores. Y como complemento, 24 naranjos distribuidos en tres filas de distinta longitud, que vienen a sustituir, con ventaja, a los antiguos plátanos que, nuestro añorado alcalde Sr. Castillo condenó a pasar por el hacha...[En 2021, son 7 columnas con armadura de cemento, y buganvillas en vez de rosales. Siguen los bancos dobles, espalda contra espalda y, en vez de naranjos, hay cuatro encinas en (una) fila].

(…) quedan dos aceras, para uso de quienes no quieran utilizar la de la calle de Sn [San] Fernando, y una calzada para carruajes, en su parte Sur, que es prolongación, hasta Cuatro Caminos, de la calle de Vargas (…) la calle de Atarazanas, y enfocando la vista hacia el Sur se encuentra con dos calles, que corren en esa dirección, atravesando el terreno que fue R. [Rúa] Mayor y R.[Rúa] Menor, completamente llanas, y formadas por edificios de 6, 7 y 8 pisos. Estas calles desembocan en el Muelle, por frente al lugar que ocupan las estaciones de los F.C. de la Costa”.

marzo 30 del 1950 [30 de marzo de 1950]

“…para cruzar a la zona del Muelle de Maliaño se le ofrecen al viandante tres hermosas vías, completamente llanas y paralelas entre sí; una, el Túnel; otra, que es prolongación de la calle de Isabel 2ª [II], y la tercera, enclavada en el sitio que ocupó la cuesta Gibaja ha exigido, la demolición de la citada Cuesta y sus dos hermanas, de R. [Rúa] Mayor y R.[Rúa] Menor. Estas dos nuevas, de gran anchura y buena pavimentación, están flanqueadas por magníficos edificios de 6, 7, 8 y hasta 9 pisos.

La Plaza Porticada, emplazada en los terrenos que ocupó la del Príncipe y algunos aledaños, está terminada ya por sus tres laterales, y el 4º se halla en construcción un tanto adelantada. (Delegación de Hacienda, Gobierno civil, Gobierno militar y Monte de piedad) todos de piedra labrada que acusan solidez y elegante aspecto. La Iglesia de la Compañía ha recobrado momentáneamente el ala que perdió para ensanchar la calle de Sta. Clara (…) el “Hotel Bahía” en el lugar que ocupó el “Hotel Continental”, soberbio edificio de grandes dimensiones y de 7 pisos de altura.

marzo 17 del 51 [17 de marzo de 1951]

“La calle de los Remedios, estrecha, fea, y siempre sucia, y que moría en su encuentro con la de Sta. Clara, se extiende ahora, en línea recta y con anchura muy estimable, hasta la Plazuela de los Jesuitas, que se ha formado, para lo cual hubo necesidad de derribar la casa o casas que siempre hubo entre dicha Iglesia y el viejo “Teatro principal”. Las casas de la calle referida, (…) fluctúan entre 5 y 7 pisos, y son grandes, firmes y elegantes (…) La de San José ocupa el suelo que siempre tuvo, pero está ensanchada, y la joroba que lucía por frente a la de Carbajal (hoy desaparecida), ha sido notablemente rebajada (…) La [calle] de Cádiz es otra de las que han ganado el 1.000 por 10: Se la ha dado gran anchura, y prolongación, haciéndola salir a la plaza de “Las Farolas”.

24-III-51 [24 de marzo de 1951]

“referente al escamoteo de otras, te diré sus nombres para que no te molestes en buscarlas: Arcillero, Carbajal, Puerta la Sierra, Socubiles, la mitad oriental de Méndez Núñez y la Blanca, que cede su nombre a la de San Francisco; otro tanto ocurre con la de la Concordia, que queda absorbida por Cisneros, pasando ésta a ocupar, en línea recta, desde la Botica de Socorro hasta Perines. Las plazuelas suprimidas son: la del Sol y la de las Escuelas”.

Dmbre 8 del 1951 [8 de diciembre de 1951]

“(…) hemos conseguido ya dar por tierra el edificio que ocuparon los Almacenes “El Águila”, quedando unidas la calle de Juan de Herrera (que se llamó antes de la Compañía) y la que, rozando hoy la acera del Ayuntamiento y la de Escalante, muere por la Alameda 1ª; se ha dado cima a una casa, un tanto rara por su forma y altura: es triangular, porque el terreno que ocupa no permite otra cosa, y su altura es tal, que mirando desde la acera del Ayuntamiento en dirección Sur, se la ve montar dos pisos sobre la cúspide de la Cuesta del Hospital. Y se asegura que están trazando los planos para construir en la gran explanada que dejó libre en su retirada la Estación del Norte, una gran Estación para autobuses”.

[25 julio] 1952 [¿25 de julio? de 1952]

“…una calle en proyecto que descendía, entre la Plaza de toros y Valdecilla, se ha trocado al fin en hermosa realidad. Hoy tiene a su derecha el Sanatorio, y a su izquierda una fila continuada de casas de cuatro pisos que llega a las vías ferroviarias. Se levantó más el terreno, con objeto de construir en lo bajo unos grandes puentes que permitieran cruzar las vías, con la prolongación, por sobre ellas de la calzada de la calle mencionada, llevándola luego en pendiente suave a enlazar con la carretera que, naciendo al fin de los Muelles de Maliaño, llega hoy a Nueva Montaña, y que pronto será prolongada hasta Astillero”. 

Dcmbre 10 del 52 [10 de diciembre de 1952]

“aquí derriban una o más casuchas viejas para levantar sobre el mismo suelo magníficas viviendas; más allá se ponen aceras donde nunca las hubo, o se sustituyen las antiguas por otras nuevas, de baldosines de cemento elaborados en la fábrica municipal (…) Los soberanos trolebuses que han substituido a los desvencijados tranvías, con excepción de uno que aún circula entre Perines y Valdecilla, llegarán pronto hasta este último lugar, pues que ya se han colocado los postes de suspensión de los cables necesarios para el efecto”.

Dcmbre 4 del 53 [4 de diciembre de 1953]

(…) este barrio de Cuatro caminos, que me ampara, se va transformando de día en día, de tal manera, que nos hace olvidar la característica apatía de nuestros conciudadanos. Los muchos y buenos edificios emplazados en la ladera Sur de la Plaza de toros están casi terminados, y habitados en su mayor parte, y en la dirección opuesta, o sea entre la Alameda y el Alta, surgen, como por arte de magia, casas de cuatro pisos, que en su totalidad darán albergue a 500 familias. -¿Resolverá esto el problema de la falta de viviendas que padecemos? -¡Qué va! Sólo aliviará un poquitín el malestar que la escasez nos produce. (…) los magníficos trolebuses que el Municipio tiene (hoy) dedicados al transporte de viajeros entre el Sardinero y Valdecilla, serán aumentados muy en breve con la compra de otros seis vehículos, con los cuales se puede prolongar el recorrido hasta el inmediato pueblo de Peñacastillo, puesta la vista para más tarde, en Astillero (…) El viejo Tranvía de Miranda murió, por consunción, pocos días ha, sin recibir los auxilios espirituales ni la bendición apostólica. Como solución temporal, le substituyen cuatro infelices camionetas, sin honra ni provecho”.

Sepbre 30 del 54 [30 de septiembre de 1954]

(…) se eligió un espacioso estanque enclavado frente a la casa de Correos y al Banco de España; y allí, rodeado de flores y flotando sobre el agua de la Molina, se destaca noche y día la gallarda efigie de Dn Pedro Velarde [En 2021, sigue rodeado de flores -2 arriates-, pero está en la plaza Porticada, entre la Delegación de hacienda y la del Gobierno]. Alameda 2ª: = aquellos trabajos fueron suspendidos, por agobios económicos que sufría el erario municipal, al llegar a Perines. Luego se han reanudado los trabajos, que caminan con gran celeridad, y solo falta en este último tramo la colocación (de) de plantas para flores, arbustos de adornos y bancos, que convertirán aquel sucio paseo en un hermoso parque de esparcimiento infantil, y de reposo a las mujerucas encargadas de la custodia de los peques, así como también de agradable mentidero a una pléyade de ancianos (…) casetón de 10 pisos que se eleva frente a la fachada principal del Matadero. Es de forma triangular, y el vértice de su ángulo más agudo se enfila, con la punta mellada, en dirección a Valdecilla, de tal manera que si le contemplamos, subiendo la pendiente que conduce al Sanatorio citado, creemos hallarnos en presencia de un buque fantástico (…) Enfrentándose, se están también terminando dos casas, unidas, de 6 pisos, en los terrenos que, ocultos siempre por altos tapiales, existen a la derecha de la car[r]etera (sic) que comunica Cuatro Caminos con el Depósito de agua de La Molina, hasta donde lo permitan los terrenos que pertenecen al Convento de las Salesas…”.

abril 11 del 54 [11 de abril de 1954]

(…) la calle de Vargas había sido prolongada en línea recta hasta Cuatro Caminos; y no habrás olvidado que en el ángulo que forma con Calzadas Altas había un espacio arbolado que servía para la celebración de ferias de ganado porcino, y vacuno también en algún tiempo (…) fue descuajado el arbolado, y en su lugar se está levantando una hermosa casa de diez pisos. Y siguiendo la calle hace abajo, están ya en planta una fila de casas más modestas, que terminará muy cerca de “Perines”. el barrio llamado “Velarde” levantado entre la “Plaza de Toros” y el Ferrocarril, ya terminado, y el barrio que ocupará en toda su extensión la gran finca de “Porrúa”.

(…) de “Juan de Herrera”. Desde luego que no está donde estuvo, ni tiene con ella ningún parecido (…) la “Plaza porticada” (lo que fue “Plaza del Príncipe”; si te sitúas debajo de uno de sus dos arcos de la fachada Oeste y miras en esa dirección, verás una ancha calle cuajada a todas horas de gente que se agita presurosa para realizar sus quehaceres, y allá, en la lejanía, un grupo de casas que al parecer tapona la calle que contemplas (…). tenemos una serie de lujosos escaparates repletos de los objetos más dispares: Telas, ropas hechas, ultramarinos, ferretería, farmacia, droguería, cirugía, electricidad, etc. Etc., talleres de manicura, peluquería de Sra., fotografía, etc… Son los nuevos “Almacenes de Pérez del Molino” [En 2021, el local lo ocupa la perfumería Avenida]. Pasamos de ahí y divisas la fachada de una Iglesia conocida, pero dudas antes de resolver, porque tú la conociste a ras del suelo, y ahora la ves cabalgando sobre unas tiendas que negocian sobre objetos diversos. Trepamos por la escalinata de acceso a la Iglesia, paralela a ella, descubrimos otra calle desconocida: la calle de Sta. Clara (…) bajando la escalinata y continuamos tu marcha por “Juan de Herrera”, y a poco, topas con otro detalle que nuevamente te orienta: El Ayuntamiento (…) ¡no es tu Becedo!– en su centro un plantío de árboles maderables; pinos y cajigas un tanto crecidos ya, y una colección de frondosos rosales con flores maravillosas.- ¿Y qué casa es aquella de 3 pisos que tapona la cumbre de la “Cuesta del Hospital”?- Tres son los que se ven, pero éstos descansan sobre otros cuatro, cimentados en el arranque de la “Rampa de Sotileza”; casa que, con otras varias de igual porte, se acoda con la entrada de la bocaza del “Tunel de las Estaciones” (…) después de dejar atrás la “Acera del Correo”, nos adentramos en la “Alameda 1ª... El arreglo de esta Alameda ha logrado tan buena acogida, que la larga fila de bancos dobles (espalda contra espalda) se ve asaltada en los días buenos, y como el 80% somos espantosamente viejos, un chusco, un tanto ingenioso, la ha rebautizado con el nombre macabro de “Antesala de Ciriego” (…) la casa, vieja y fea, esquina a “Cervantes y Correos”, será derruida pasados algunos días, para substituirla por otra de gran valía, alineada con las de la Alameda”.

enero del 55.

(…) ¿conservas aún, en algún rincón de tu fértil memoria, la vieja efigie de la desmedrada Casa de Socorro, que se codeaba con el “Mercado de la Enseñanza”? (…) en su lugar un cumplido edificio de cuatro pisos (…) al N. y al N.O. de él, otros grandes bloques de cemento, habitables, que sustituyen a cocherones nauseabundos y antiestéticos que de antaño venían poblando aquellos rincones (…) la “Acera de los Escalantes”, topamos con una numerosa brigada de obreros municipales trabajando incansables en reforzar la pavimentación de la calzada que se hermana con dicha acerca (…) frente al Túnel, alcemos la mirada sobre boca y veremos cerrado el horizonte por varios edificios en rrápida (sic) construcción (…) Unos pasos más hacia el O. y entramos en la plaza de Numancia, sobre el local que ocupaban los antiguos cocherones que tú conociste, se engallan elevadas casas (10 pisos) modernas (…)

Por el callejón de acceso a lo que fue un día salón de baile (“El Alcázar”) se está dibujando una nueva calle que debía morir en la de Perines, pero no podrá llegar ahí, por ahora, por impedirlo el emplazamiento de la fábrica de cervezas “La Blanca”...

[Los extractos proceden de: J. R. Saiz Viadero: "Epistolario Ferrer-Herreros (México-Santander, 1946-1955), constancia de una amistad y lealtad republicana" en VV.Ed.: Destinos del Exilio Republicano. III Congreso de Cantabria, Fundación Bruno Alonso/Centro de Estudios Montañeses, Santander, 2020, pp. 481-518]. ¡Gracias, Ramón!