El cartel dice “Ruta
termal”, pero yo la he rebautizado como “Ruta de los balnearios”. Según el
cartel, hay 6´7 kilómetros entre el
balneario de Solares y el de Liérganes. Y 300 metros de desnivel. Lo que más
risa me provoca es la “duración”: 1 hora
55 minutos. Menos mal que añade
“aproximada”. Yo sé que, para mí,
siempre es el doble… Además, siempre me fijo en la topografía: desde
Hermosa hay una subida fuerte hasta el Mirador de La herradura, a 162 m…
Cogemos el tren a Liérganes
a las 9.14 h en la estación de FEVE de Santander. En una media hora, estaremos en Solares. Sugerí
a “las chicas” que podíamos partir del aparcamiento de Valdecilla (así, 1´5 km
menos para mí, que no sé cómo y si llegaré…Por si acaso, me llevo teléfonos de
taxi en Solares y Liérganes…).
Salimos sobre las 10 h de la estación de Solares
rumbo al pueblo de Valdecilla y a la finca del marqués. Es una subida de unos
70 metros donde dejamos atrás el colegio público comarcal, el Ayuntamiento y la
iglesia-faro.
Junto a la portalada de
entrada, un cartel indica “Hermosa 3”. La casa natal del marqués de Valdecilla
(de 1783) sirve de panel para los azulejos del
cartel del pueblo y está frente al lavadero y la fuente de Santa Matilde
(de 1864).
Al terminar los límites de
Valdecilla, comienza un camino “rojo” (peatonal) enmarcado por plátanos, que
pasa ante el humilladero de Hermosa para llegar al pueblo.
Sobre las 11 h estamos
sentadas en el banco corrido de lajas circular alrededor de la fuente de La
Graciela. El lavadero rehabilitado luce unos azulejos que reproducen los
distintos trabajos, desde el transporte al tendido.
Ya restauradas, abordamos la subida, un poco resbalosa por el verdín y
el musgo: de cuando en cuando, un puentecito de madera salva riachuelillos y
pequeños cauces de agua. Ya arriba, en el mirador, encima a chispear un poco.
Nos ponemos capas y gorros y empezamos la última etapa: la de optar por un
camino de tierra o seguir por la carretera y el camino rojo paralelo. Cogemos
el camino que desciende hacia un grupo de casas. La señalización, que, hasta
ahora, no ha ofrecido dudas, nos tiene aquí un poco perplejas.
Hemos elegido bien: salimos
al barrio de Calgar y, pronto, a "La posada del sauce", donde ya sabemos en qué lugar
estamos. Son las 12.30 h. hemos hecho una media estupenda...
Hacemos cola en María Luisa para comprar unos dulces y cogemos el tren de vuelta sobre las 13 horas. Ha sido un día redondo…
SABER
MÁS
https://www.eldiariomontanes.es/region/trasmiera/pueblo-valdecilla-arregla-20201123123803-nt.html.
El pueblo de Valdecilla arregla el lavadero y la fuente de Santa
Matilde.
Una curiosidad
Una pata (¿de dinosaurio…?) en la acera
Es un signo de tres
dedos de cuando en cuando que, a mí, me recuerda la vieira insertada en el Camino
de Santiago. No sé a qué pueda deberse ni qué indica.
Al llegar a casa,
una compañera de excursión, me envía la respuesta: pertenece al juego y al proyecto
Dejando huella, y a la pata de la rana
Pepita.
Conduce a 7 bancos
que marcan 7 lugares del municipio con historia. Uniendo las letras de la palabra
de cada banco se consigue solventar un mensaje “secreto”…
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