De PEÑACASTILLO, dice el diccionario Madoz, en 1850, que tiene una población de 180 vecinos (186 casas), 1.041 almas, distribuidas en los barrios de Adarzo, San Martín , Ojeiz (es Ojaiz) y Camino Real (hoy, Camarreal).
Habla de 3 ermitas, la
iglesia parroquial de San Lorenzo y la quinta de Campojiro (Campogiro); de esta
última, con gran profusión de detalles: “tiene… dos estanques, uno de agua
dulce y otro de salada; el primero es de figura circular construido con
magníficas piedras labradas en su cerco, con un grupo de piedra coronada por el
Dios Neptuno en su centro. El segundo es cuadrilongo y se llena cuando las
mareas suben…Cuenta esta finca más de 6.000 árboles frutales y, además, muchos
robles, chopos y álamos…Se crían ganados caballares y vacunos, siendo la
manzana el artículo que más se produce”…
A 4´7 kilómetros de
Santander, en la actualidad acoge a más de 18.000 habitantes en muchos más que
los 4 barrios del siglo XIX: Campogiro, El Castro, Lluja, Rucandial, Nueva Montaña, La
Peña, La Reyerta y el polígono industrial de El Campón.
El monte (la peña) tiene una
altitud de 138 metros sobre el nivel del mar y es reconocible desde los
primeros mapas, en el siglo XVI.
Jueves,
5 de octubre de 2020
Pasadas las 8.30 h, salgo
como un rayo. Hay que aprovechar cada segundo del desconfinamiento…12 grados a
las 8.52 h.
El final del trayecto del 3
es la parada Barrio de Ojaiz, 166, junto a Eneldo y Tomillo. Aunque al subirme
pregunté al conductor por la parada más cercana a la iglesia de Peñacastillo,
una vez dentro decidí ir hasta el final de la línea para volver a pie.
A las 9.30 h empiezo a andar
de vuelta. El día no está tan despejado como decían, y sopla un ris…
Las casitas al lado de la
carretera general (lo que en tiempos fuera el Camino Real) son como de pueblo,
pero, más dentro, ya se ven chalés y adosados.
Cojo la calle Ojaiz, en dirección
al hotel Antoyana, para salir un poco al sol (y me pongo el forro polar y el
pañuelo en la cabeza). En la calle Camarreal-Ojaiz, puerta, desde luego, sí que
tiene. Más parece fortaleza que hotel…Y tiene perros furiosos…
Siguiendo uno de los tramos
de carretera que, de nuevo, me llevan a la general, salgo frente al hotel Deseos…
Delante de la parada de
Ojaiz, en el número 8, una de mis casas favoritas (cuando paso en autobús
desde o hacia Torrelavega, siempre me parece suiza, ), aunque ya un poco machucada. Un
poco más allá, el cartel del famoso pan de Ojaiz. En una nave, a su derecha, aún
se puede leer “Panadería La Esperanza. Salvador Mier”. ¿Aún es despacho de pan…?
Paro en la gasolinera, a
comprarme una chocolatina, y para ir al baño. Hace demasiado frío para
desnudarse en un prado…
Antes de la rotonda, se ve
la torreta del nuevo parque de bomberos y, a la izquierda del donuts, resiste
una casa con sus 3 palmitos y su reloj de sol. ¡Qué raro que no la expropiaran…!
¡Y que siempre me tengan que
poner un poste, una farola o un nudo de cables en el punto de fuga…!
El antiguo camino real está
un poco destartalado. En el lado derecho han levantado unos edificios de pisos de
tres alturas (o de dos y un bajo), que siempre me han encantado. Otros, se han
quedado sin terminar…
Junto a las cocinas Carlos Uriarte, alguna casa se
vende o parece abandonada. Tanto ruido junto a la carretera…Creo que ni con cristales
triples…
“Se venden pimientos asados
naturales”. No sé si ya te los venden asados o son de los de asar, para que los
ases tú en tu casa…
El Centro Cívico Camarreal
son las antiguas escuelas, rehabilitadas en 2007.
A las 11 h cojo el bus en el
parque municipal El Bosque. Estoy congelada. Casi no puedo ni escribir…
Con los casi 4 euros que
llevaba, para una emergencia, además de la chocolatina de la gasolinera, me
compro en Lupa media docena de huevos e incluso me da para un rosco de vino (0´19
euros), y casi para dos… Cuanto menos dinero tienes, más lo estiras y para más
cosas te da…Me lo voy comiendo gotonamente
mientras bajo por la alameda de Oviedo.
28
de febrero de 2012. Sendero de la peña de Peñacastillo. Notas
Ya lo había recorrido hace
ocho años…
Según el folleto, son 2´25
km y lleva una hora y media recorrerlo. Es para todas las edades, pero se
advierte de un desnivel importante en el ascenso a los dos miradores (Ahora lo
recuerdo: no llegué arriba porque había mucho barro y temía resbalar y, además,
estaba la trocanteritis…).
Se destacan como elementos
de interés la iglesia de San Lorenzo, el arboreto y el eucaliptal.
“No tendrá dificultad, pero la subida hasta la iglesia ya te mata…”- escribí entonces. “Menos mal que, al final, hay un par de bancos para recuperar el resuello”…
Viernes,
6 de noviembre. El parque de La Remonta, tres años después
https://ficcionesdeloreal.blogspot.com.es/2017/02/viernes-foramontanos7-en-el-parque-de.html. En
el parque de La Remonta, en 2017.
Sobre las 9.30 h, cojo el
bus (el 3) en San Fernando en dirección a La remonta. Antes, me he comprado un
par de roscos de vino en el Lupa (con los 45 céntimos que llevo hoy, aparte de
la tarjeta del TUS). En mi mochila, un sándwich y un termo con agua.
Me bajo en la urbanización
Las Palmeras: quiero comprobar qué queda en la finca desde los tiempos de
Madoz, allá por 1850 (entonces se hablaba de robles, chopos y álamos, y muchos
árboles frutales, manzanos sobre todo).
¡Vaya! “Paseo temporalmente
cortado por inundación…”. ¡Estoy gafada!...
¡Cierto! La zona del
estanque está inundada y el agua ha invadido el camino. Un chico se ha dado la
vuelta, pero yo llevo mis superbotas…
El día está espectacular. En
un cartel, pintarrajeado, se enumeran los pájaros y la vegetación (nenúfar
blanco, carrizo, espadaña y lirio
amarillo; y, en los márgenes, salguera negra, saúco, laurel y aladierno).
Rodeando el estanque, han
instalado varias cajas nido y plantado árboles (salgueras, encinas…). Distingo
fochas (por el pico blanco), gaviotas, y otros (que no sé identificar)…
En el camino, se alternan
árboles que me parecen manzanos (aunque con manzanas “bonsái”), y otros, que no
sé qué son. Tienen riego por goteo en su base.
Hay muchos pies de árbol
“encamisetados” con un cilindro verde, para protegerlos en su crecimiento (por
el método Miyawaki, leo luego en casa, una plantación muy densa “que acelera el
proceso de desarrollo de la vegetación”). Entre la carretera y el ruido fabril,
destaca el piar de los pájaros, felices en su jardín.
La zona de rocalla, en una
depresión del terreno, ha quedado muy bonita. En el cartel, explican que se han
plantado árboles como encinas, robles, hayas, cerezos, arces, fresnos, tilos y
alisos. Y arbustos como laureles, madroños, espinos, avellanos, saúcos,
aligustres o cornejos.
En el prado, veo matas de
achicoria silvestre, arvejas, centáureas o malvavisco.
Pregunto a dos operarios de
jardines sobre los frutos diminutos que me tienen…”Ahí me has pillado…”- dice
uno. El otro, muy seguro, afirma: “Cerezas…”. Yo pienso que podrían haber
plantado manzanos para recrear la época del conde de Campogiro.
Hay gente que se diseña
circuitos para correr sobre la hierba, campo a través. He visto a un señor que
lleva, por lo menos, dos vueltas. De hecho, las pisadas han ido trazando un
camino…
Ahhh… Es un circuito de running. Veo un poste rojo que pone 800
(metros, supongo). Y, más adelante, hay otro. Son postes de cien en cien
metros. El señor de la camiseta roja no sé cuántos kilómetros se ha hecho ya…
Un poste en amarillo que
pone 300 me despista. ¿Será un circuito de corto recorrido, como en los
senderos…? Por la parte superior del parque huele fatal, a fábrica. Llego al
poste que indica 1.000 metros en el vértice de la valla, para bajar luego.
El de 400 metros, en
amarillo, alguien lo ha cascado y está tirado en el suelo…Salgo a un tramo de
asfalto, en perpendicular, y el camino sigue al otro lado. Continúo hasta el
siguiente tramo de asfalto y el camino que baja sé que está interrumpido por
una prolongación del estanque…
Una focha nada tan feliz que
casi se ha salido al paseo, aprovechando la extensión de la laguna.
https://turismo.santander.es/wp-content/uploads/2020/08/parque-remonta.pdf. Ficha de “Parqueando”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario