lunes, 23 de marzo de 2020

DIARIO “Un año mirando desde el balcón” (5). ESTADO DE ALARMA, ¡quédate en casa!

Miércoles, 4 de marzo de 2020. 7.25 h

Esta semana daban malísimo, pero en mi pasillo tengo casi 20 grados (aunque la humedad ha subido al 59%).

Ayer es verdad que hizo un viento que, a mí, casi me llevaba (y eso que peso 80 kilitos, kilo arriba, kilo abajo…).

Las gaviotas ya chillan a esta hora y se oye el rumor sordo, ininterrumpido. lineal, del tráfico/la industria?.

Empieza a amanecer. ¡Qué gusto ver luz tan pronto! El cielo está todo nublado, pero no llueve.


¡Mira! Hoy no dan lluvia en el móvil (temperatura entre los 13 y 17 grados y humedad del 93 % - en la calle. “Mayormente nublado”).


A ver si salen pronto mis caléndulas. Planté las  semillas el viernes pasado, con buena tierra, y las regué con agua templadita para que se pusieran contentas. Las jardineras del vecino del 3º parecen una selva…


Donde las bayetas puestas a secar, hoy solo hay pinzas, y en el saliente del patio han caído un calcetín y unas bragas. Alguien debe tener las manos de mantequilla…


Viernes, 6 de marzo. 7.30 h 

Hoy, lluvia con viento: lo peor. Cuando abro la ventana del balcón, oigo su ulular.

En la lucera del patio interior, se oye el repiqueteo de la lluvia y las rachas de viento. En el móvil, veo: 53 km/h, 8 grados y un 83 % de humedad (en casa, sigo con 20 grados y un 60 % de humedad, ahora mismo incluso sin radiadores de aceite).

El cielo está negro, como de nieve (panza de burro) o de granizada inminente. Espero que mis caléndulas no se congelen…


Las nubes pasan veloces y en las oficinas de la calle Burgos hay una luz mortecina, como de xenon.


Los únicos que parecen disfrutar con este día de perros son los helechos del canalón de enfrente.Voy a meterme, que no quiero coger el coronavirus…



Miércoles, 11 de marzo. 7.05 h

Tranquilidad total a esta hora. Mi “dinosaurio” sigue inmóvil. Todo silueteado en mi “línea de cielo”: las antenas, las grúas, los tejados…


Una luz desconocida me deslumbra en “las torres blancas”: me doy cuenta de que es el reflejo del sol (que aún no ha salido) en los cristales.


Las gaviotas vuelan a sus quehaceres en distintas direcciones. En cuanto a las palomas, estas me están perdiendo el respeto: cada vez me pasan más cerca. Riesgos de mi “pajarización”…

Mi vecina del 5º ha puesto a secar unas zapatillas de deporte y la H azul del hotel aún sigue encendida sobre la estructura de un tejado en la calle Vargas.


Hoy dan sol y ahora hay 9 grados. Humedad: 92 %. Dentro de casa: 19 grados y un 60 % de humedad.

Mis caléndulas enanas se siguen desarrollando.


P.S. Mi economía de guerra: en esta fiebre acaparadora del coronavirus, yo he comprado 1 kilo de garbanzos y otro de alubias. Por si acaso…


P.S.2. Por fin tenemos los tres cubos... Aunque están rotos...



LEÍDO ESTOS DÍAS

https://www.eldiario.es/consumoclaro/ahorrar_mejor/construir-hotel-insectos-terraza-jardin_0_1004049897.html. Hoteles para insectos.

Viernes 13 de marzo. ¡Quédate en casa!


Ni taller (suspendido) en Trasvía; ni taller en la biblioteca municipal (suspendido) de Santander el lunes. Ni en Villacarriedo, a finales de marzo… (Y soy autónoma y “uniempresa”…).

Con la recomendación de “no salir” o “salir lo menos posible”, solo me queda ser NO ama de casa: me dedicaré a hacer un marikondo de libros y papeles  (siempre procrastinado/aplazado) y pequeñas obras para las que nunca tengo tiempo: vaciar las luces de pececillos de plata, repasar con barniz o pintura pequeñas superficies, limpiar con fruición -en plan limpieza general, como las que hacía mi madre en sus tiempos jóvenes, cada tres meses-...En fin, ¡qué placer…!




Historias particulares

Salgo a comprar (media docena de huevos, que ya no tengo; unos yogures (el té solo me da reflujo y ahora desayuno yogur); fruta (4 manzanas y 3 kiwis), que tampoco me queda… Y ya.

Por la calle Burgos, la verdad es que ves un río de gente. Me encuentro con una exalumna de UNATE (se ha quedado viuda recientemente y vive sola): “Yo es que estar 24 hora seguidas en casa…”. Va hasta el Chiqui a paso rápido, y se vuelve. “No creo que…”.


En el super, la cajera suspira de alivio: “Menos mal que alguien sonríe…”. Le queda otro día duro. La gente se lleva las cestas a casa con la compra y casi ya no quedan. Tampoco hay bolsas de plástico de las fuertes. Cuando una señora se queja: “¿Y qué quiere que le haga…? No cobramos las finas; si quiere, se lo saco todo…”. Desbordada. Y lo que le queda…

Sábado, 14 de marzo. Tras el estado de alarma

El día es excelente. Ha amanecido con sol. 9 grados, aunque la humedad es del 86 %.
Otro sábado cualquiera hubiera ido a la piscina a las 9 h, pero el último día que fui fue el jueves. Hoy está cerrada. “Metropolitan …ha decidido de forma voluntaria… cerrar todos los centros hasta el 27 de marzo [viernes] incluido”…En el área de socios han puesto una serie de entrenamientos y de consejos saludables para que la gente no deje de hacer deporte.

Al salir de la piscina hubiera comprado el pan y, quizá, desayunado por segunda vez. Hablo con el panadero: “Es que las cosas se han hecho muy mal…”. Se refiere a los que “escaparon” de Madrid, zona de riesgo, para irse durante su cuarentena de “vacaciones” al mar, portando sus virus de norte a sur y de este a oeste...

Me cruzo con un runner, que corre solo por la acera, y con varios paseadores de perros. En la calle Burgos oigo estornudar detrás de mí de una manera que ni codo, ni mano, ni nada: a esparcir esporas...

Comercios con página web cierran y remiten a esta en los carteles pegados en el escaparate. Delante de Carrefour, poco antes de las 9.30 h, más de 20 personas esperan a que abra manteniendo la distancia de seguridad, los que son ajenos. En las tiendas abiertas (de ropa, droguerías…), no entra mucha gente (salvo en supermercados).


Algunos bares no han puesto cartel, pero están igualmente cerrados. En los autobuses municipales se avisa que solo se puede pagar con la tarjeta TUS (no en metálico) y que hay que entrar por la puerta de atrás [para proteger al conductor].

En el Palacete del Embarcadero los habituales siguen pescando con sus cañas: “Le dio el pan con la mano, y no veas la que se montó…”- oigo.


A las 10 h el sol empieza a quedarse “frío”. Avanzan las nubes y no sé cuánto durará el buen tiempo con la DANA  que dicen que viene…

Yo me he comprado una gerbera y he preparado en la cocina "mi rincón de pintar"...


Por la tarde, en casa


Estoy flipando con los anuncios de la tele: seguros de deceso, lubricantes para las chicas… ¿Siempre ha sido así o, con el coronavirus, sexo y muerte están más cerca…?

¡Qué bien! Una peli del oeste para la sobremesa…Es una patochada grosera: prefiero mis alemanas…

Sobre las 18 h…Solo me apetece hacer “marikondo” por la mañana. Cuando la luz solar decae, como que no…

Domingo 15 de marzo, 6.30 h. Confinamiento


Media luna menguante en el cielo. Hace frío. Parece que hubiera helado: los tejados se ven brillantes.

Está clareando y se oyen los gañidos (parecen pequeños ladridos) de las gaviotas. Pasan en bandadas con sus tripas blancas a la luz de la luna.


De momento, despejado, aunque dicen que por la tarde llegarán las lluvias de la DANA (Depresión atmosférica Aislada en Niveles Altos, lo que antes llamaban “gota fría”).


https://www.eldiariomontanes.es/sociedad/vuelta-invierno-invitara-20200313161600-ntrc.html. La vuelta del invierno invitará a quedarse en casa para prevenir el contagio del coronavirus.

Hoy es el primer día del “confinamiento”. Ya no puedo/no se puede pasear, aunque sea sola y sin hablar con nadie…

Pero quienes tienen perro, tienen que sacarlo obligatoriamente para hacer sus cositas. Y también hay que tirar la basura…

El barómetro ha bajado cuando lo miro a las 8 y 20 y, desde ayer, también ha bajado la temperatura dentro de casa, de 20 a 18 grados. Se anuncia la DANA…

A las 8.45 h salgo a tirar los papeles y cartones que descarté ayer. La propietaria de un perro entra  en su portal y un chico va leyendo el móvil por la calle.

Un mirlo macho corretea primero por Peñas Redondas y luego por la calle Frontón. No me tiene ningún miedo. Si cuando digo que me estoy pajarizando…


En la calle San Luis está abierta una lavandería 24 h. Tiene máquina de café y de aperitivos. No hay nadie. Una chica con una maleta de ruedas baja Isabel la Católica en dirección a las estaciones.


Mi quiosco más cercano, en Jesús de Monasterio, está cerrado (aunque no el que hace esquina con Pasaje de Peña). Los pocos que andamos por la calle pasamos a una distancia prudencial unos de otros. En los autobuses municipales van dos o tres personas, o nadie, directamente.

A las 9 h, hay 12 grados en la calle, al sol. Pronto empieza a nublarse, como ayer, y a quedar el sol “frío” (Esto ayudará a no salir de casa…).

Llego hasta la calle Isabel II, y me vuelvo. Hace un frío de bigotes.


Ya cerca de casa, pasan tres gaviotas persiguiendo a una paloma: ¿se la querrán comer…?

Las nubes negras vienen cabalgando por el oeste, desde Cuatro Caminos. A las 9.15 h estoy entrando por la puerta.


En casa

Voy a empezar, ahora que todavía hay buena luz, a hacer mi “marikondo”. Cojo solo una porción pequeña de desorden, para que no me abrume…En el cubo de la fregona tengo permanentemente agua jabonosa…

Con los discos de algodón de desmaquillarse (íntegros, porque nunca me maquillo…) me pongo a limpiar el teléfono fijo, que debe tener bacterias desde hace diez años, por lo menos…Luego, veo unas pelusas en el cajón del baño, en las que no había reparado nunca (si es que todo es ponerse a pasar el dedo…). Pongo cif en la bayeta y me queda niquelado.


Después, decido repasar las maderas de los cristales, por dentro, que estaban muy deslucidas por el sol. Ya, aprovecho, y “pincelo” todo lo que se me pone por delante, que necesita algo de barniz: la puerta de la calle, la cajonera de los contadores de agua… (Vamos, que si me dejan, como Chaplin en la peli que atornillaba hasta los botones…). Creo que por hoy ya es bastante: estoy agotada…

Lunes, 16 de marzo. Primer día laborable confinados en casa. 9.15 h


Como estoy acostumbrada a comprar al día (es una forma de obligarme a salir los días oscuros y lluviosos del invierno), no tengo comida más allá del fin de semana (no me quedan yogures para el desayuno, ni apenas jabón de lavadora, ni atún en lata…No tengo carne…).

Buscando andar lo más posible (entre mis comercios habituales de proximidad), me hago mi ruta de compra: El Lupa de Numancia, la panadería de Cisneros y el despacho de La Ermita en Jesús de Monasterio (para mi mermelada favorita de ciruela).

En el Lupa de Numancia limitan la entrada (como cuando hay números clausus en los museos) y, fuera, hay una cola como de diez personas, separadas por algo más de un metro). Bufff. ¿Pero no habían comprado ya todo…?

Paso y decido ir a la siguiente parada: la panadería. Una señora mayor -quizá una habitual del café del desayuno-, asombrada al ver recogidas las sillas, se queda un poco cariacontecida cuando el panadero le explica que solo puede expender cosas para llevar.

Decido continuar hacia el Lupa de la calle Cisneros, a ver si hay más suerte  (recuerdo que, cuando vas al monte, todo el mundo se suele quedar en los lugares más cercanos al aparcamiento y, cuanto más lejos llegas, menos aglomeración hay…). Aquí dejan entrar libremente, aunque en la cola para pagar se guarda el metro de distancia. No queda nada de verdura (aparte de tomates). Les oigo decir que el camión no ha llegado aún (son las 9.30 h). Compro un tarro de pimientos rojos asados, en vista de que no hay frescos (por si hago unas alubias…).

Bajo por Cervantes y, en la tienda de mis mermeladas, hablo con la dispensadora. El problema que ve ella es que en ese 60 % de población que puede enfermar estén quienes atienden en los comercios, y que tengan que cerrar. Bueno, supongo que ya pondrían a alguien…

De vuelta a casa, en mi ruta circular, veo la carnicería sin gente. ¡Bien! Le digo a Jesús lo habitual: “¿Me pones 4 filetes finos de  lomo sin adobar y cuarto de carne picada…?”.

En la calle, he visto más gente de la que imaginaba. Me he cruzado con varias personas que iban con mascarilla (¡vaya!, de la nada al terror…). Solo los trabajadores de exterior (en la calle Isabel la  Católica, que están remozando, o alguno de los que tiran cables en Peñas Redondas) llaman la atención entre las personas solas que vamos a comprar. Antes de las 10 h estoy en casa.


La picaresca

Ayer me contaba mi hermana que había uno que iba con una barra de pan dura del día anterior  diciendo que iba a comprar el pan, para salir de casa y darse un paseo…

Yo estoy segura de que alguno de los que me he cruzado con papeles bajo el brazo, también decía que iba a trabajar…

En la calle Burgos había un coche de la policía, pero como otras veces: ni enviaban a casa por el altavoz, ni en persona.

Leído en el Diario Montañés

"Yo me pensaba que iba a ser la ciudad fantasma, y nada, la gente en la calle Vargas está "de recados", narra a El Diario Montañés una lectora vecina de Santander.

P.S. ESPAÑA. 16 de marzo. 9. 45 h. En fase de mitigación

Contagiados: 7.844. Muertos: 292. Recuperados: 517

Cantabria: Contagiados: 52 (18 hospitalizados, 1 en UCI). Recuperados:10

https://www.eldiariomontanes.es/cantabria/claveslos-centros-salud-20200316230650-ntvo.html. Los centros de salud sólo atenderán lo urgente y ya no se harán test de coronavirus a domicilio.

A partir de ahora las personas que empiecen a notar síntomas compatibles con el Covid-19 (fiebre, malestar general, catarro o resfriado), si es de forma leve, -el 80% de los casos-, ya no tienen que llamar a los teléfonos de emergencias y urgencias (112 y 061) para que les tomen las pruebas microbiológicas en casa, como se ha venido haciendo. Tanto desde el 061 como desde el 112 se pide insistentemente que no se les llame para consultar dudas sobre el coronavirus -para eso se ha habilitado el teléfono 900 612 112-, porque se colapsan las líneas y se interfiere en la asistencia a urgencias vitales.

https://www.eldiariomontanes.es/sociedad/salud/jacob-lorenzomorales-mayo-20200315230846-ntrc.html. El investigador Jacob Lorenzo-Morales: “Hasta mayo no habrá una contención, y solo si la gente sigue las medidas”.

P-¿Qué plazos maneja la comunidad científica para que la situación vuelta a la normalidad?

R-Si todo el mundo cumple, que hay mucha gente que no quiere cumplir, hasta mayo no veremos una contención total o una desaparición, y eso solo en el caso de que todos cumplamos. Y digo mayo porque habrá más calor y rayos ultravioletas y, en principio, eso debería ayudar a eliminar el virus.

P.S.2. Mi rincón de "bricolaje".... Buen momento para barnizar, repintar...


Por la tarde

He dado la segunda mano de barniz a mis ventanas por dentro.



20 h

Es emocionante oír silbidos y aplausos a las 8 de la tarde cada día. Una sensación de que “todos estamos en el mismo barco” y de que “vamos a ganar”.


Martes, 17 de marzo. Segundo día de confinamiento. 7.30 h

Día gris. Los pájaros piando (píos, silbidos…) por la primavera, y yo aquí, encerrada…


Hay un arbolito en tiesto en el patio del 27 (creo que es un níspero, un árbol que siempre me ha parecido aburrido y monótono, no sé por qué. Lo mismo que el aligustre…) que se llena de pajarines. No sé lo que son. No los veo de tan lejos. ¡Pero si tengo prismáticos…!


¿Es un estornino negro el que está en la antena…?


En el calendario de la cocina voy tachando, con una cruz negra, cada día menos que nos queda de enclaustramiento.


9.30 h. Un señor en bata da de comer a las palomas del tejado desde su buhardilla. ¡En algo hay que entretenerse…!


Cuando vuelvo de la compra, veo que el Espacio  Ingenieros, en la acera de los números pares (infrautilizado y cerrado durante meses), es, o va a ser, un gastro-bar. A buenas horas…


He redescubierto (cuando estás acostumbrada a comprar en un sitio, vas a piñón fijo…) y recordado que en la esquina de Magallanes con Isabel la Católica hay una verdulería-frutería. Hoy iba a por pimientos (uno verde y uno rojo), zanahorias (3), cebolletas (un manojo) y patatas (2): que no tenía nada.

Cuando he hablado por teléfono con mi madre, me ha dicho que hoy tiene un día malo. Lleva sin salir de casa, para nada, desde el miércoles pasado. Ese día estuvieron en el parque de la Viesca, con sol y un día totalmente primaveral, y lo recuerda como si hubiera estado en Disneylandia: un sueño…


Miércoles, 18 de marzo. Tercer día de confinamiento

El lunes anulé la cita que tenía para hoy en el oftalmólogo (era una revisión anual y no tengo complicaciones…). “Estamos dando cita para dentro de un mes…”. “Casi póngame en octubre…”. Por si esto se alarga…

He decidido barnizar mi silla de “directora de cine” para ponerme en el balcón y, cuando lo haya, tomar 20 minutos de sol. Ya puestos, he dado unas pinceladas en algunos arañazos de la puerta de la calle y en todo lo que me encontrado por delante que lo precisara. Me han quedado algunos churretones, pero bueno…Otro día, me meteré con la pintura (desconchones en las puertas, pintar patas…).


Sobre las 9.30 h inicio mi ruta habitual a la compra: El Lupa de Numancia (que siempre tiene cola fuera), la panadería y el Lupa de Cisneros (hoy no había guantes de plástico a la entrada. “No quedan”- me dijo la encargada. Pero sí los había en el rincón de frutas y verduras. Yo hoy no necesitaba nada de eso. Los guantes de plástico, habrá que ponérselos, pero yo, ayer, cada vez que pesaba un pimiento, se me pegaba la etiqueta a un dedo y se me iban quedando descabezados…

Hoy, la calle Cisneros, me huele a pis. Por la acera de enfrente, un señor mayor se cruza con una embarazada y, me da la  impresión de que ella contiene la respiración. Solo las obras en la calle siguen: andamios, zanjas…

En la vuelta a casa coincido con un señor de esos que parece que hablan solos y es que tienen un pinganillo para comunicarse por el móvil. No recuerdo si antes llevaba papeles en la mano. Si no, ¿una excusa para pasear bajo la tapadera de ir al trabajo…?

Siempre hay anuncios enternecedores..."Salud para todos. Un abrazo".


15.45 h. Huele a repollo y la grúa sobre la calle ¿Alta? se mueve lentamente, unas veces, y otras gira en redondo como un molinillo.


Se oye música de country, o igual es folklore. ¿Camela, Nando Agüeros…? Mi cultura musical desde que murió Paloma Chamorro y La edad de oro es casi nula…

Me he sentado en mi silla de directora de cine recién barnizada y observo con solo una de las hojas de la ventana abierta. Las banderas españolas vuelven a ondear. Salvo que sea por el Día del Padre, mañana, debe de ser para dar ánimos, supongo…


No me había fijado pero, bajo el níspero del número 27, hay dos calas o mantos de la virgen, que destacan por el blanco de la flor. Pareciera que estamos en verano: en mi patio trasero, que da a los tejados y a la parte de atrás de la calle principal, todo el mundo tiene las ventanas abiertas.


A las 21 h. Tras los aplausos de las 20 h


Y ahora, palillos chinos y cacerolas. ¿Qué será lo próximo…? Al día siguiente, leeré en los periódicos que la cacerolada estaba dedicada al rey (había un hastag: “caceroladareal”), para pedir justicia y transparencia, a cuenta de la herencia y los millones en Suiza. Incluso hay una petición en change.org pidiendo que se donen a la sanidad pública...

Jueves, 19 de marzo. 4º día de confinamiento. Día del padre

No me imaginaba que mi experimento (este diario, titulado Un año mirando desde el balcón, iniciado en noviembre, pensando en que algún día -cuando fuera muyyyy mayor- no pudiera salir de casa), se haría realidad. Proponía solo 10 minutos al día, contando, fundamentalmente, lo que percibía por los sentidos (vista, oído, olfato).

Hoy he desalojado de mi “lámpara de barco” del pasillo el/los pececillos de plata que llevaban años muertos y achicharrados. Me costó desatornillar las clavijas y luego volver a atornillarlas (en escorzo, subida en lo alto de la escalera). Cuando sea vieja, se quedarán ahí, por los siglos de los siglos ¿Es que son tontos, o qué…?


Sobre las 9.30 h inicio mi circuito de la compra del día: en la carnicería portan mascarillas por recomendación del gremio. Mientras me cortan un pedazo de carne para hacer guisada con verduras, hecho una parrafadilla sobre lo que vamos a prender con esta crisis. “Sobre todo, paciencia”…- me dice Jesús.

Luego, al Lupa de Cisneros, a por unos guisantes y zanahorias para echar a la carne, algo de fruta y cojo también un tarro de espárragos. Y vuelta a casa, parando a por una cabeza de ajos, que se me había olvidado, en la frutería Gama. Me acuerdo también de la miel, pero a mí la que me gusta es de brezo (o, como mucho, la oscura del bosque), y solo tienen de romero…

El día está lo que los ingleses llamarían gloomy. No despeja, a pesar de que dieron para hoy  22 grados, y no parece que vaya a salir el sol.


Cuando me asomo al balcón, me fijo en que dos de los tejadillos del número 27 están llenos de colillas. Entiendo que la gente se aburra y salga a fumar al balcón, pero ¿por qué no tira las colillas en SU basura…?


A las 12 h suenan las campanas. ¿Es algo nuevo…? Si no, no me había dado cuenta…(En Telecantabria, oiré luego que eran campanas “por San José”…).También mi sensación es que ahora la gente abre más sus ventanas, como para estar en contacto con el exterior.

En estos días se está convirtiendo en una costumbre que, cada tarde, a las 18 h, y tras ver mi serie favorita, me siente en la cocina a pintar hasta la hora de los aplausos (las 20 h).Yo, que lo más que pintaba era en el taller de los miércoles, me he acostumbrado a concentrarme y relajarme de esta manera, Hoy, he puesto en la olla carne guisada con verduritas y, mientras se hacía, pues, ¡a pintar!


17. 45 h. Un vecino del 27 ha sacado todas sus zapatillas de deporte a pasear.


20 h. Silbidos, bocinas…Hasta me ha parecido ver un murciélago que huía despepitado… “¡Viva la sanidad pública”- grita una.

Viernes, 20 de marzo. 5º día de confinamiento

Que lo de “Don Pepito…” era en Madrid. Por lo visto, a alguien se le ocurrió este diálogo entre balcones con la canción de los payasos de la tele. Por wásap se difundió que empezaban los números impares y contestaban los pares. Aquí, en Santander, nada de nada.


Hoy ha amanecido con una niebla “puré de guisantes”; luego, salió el sol y aproveché para tratar la herrumbre de mi “cajón vertical” de verduras y flores. Saco el minio, que tenía hace años sin abrir, para aplicarlo antes de la pintura. Pero yo creo que ha muerto: está tieso y no puedo ni clavar el pincel. Encima, contiene plomo, pone que es nocivo por inhalación y que puede perjudicar la fertilidad (lo último, a estas alturas, ya me importa un poco menos…). 


Cojo el pincel más pocho que tengo y, como no sé si se limpia con aguarrás, acto seguido lo mojo en pintura negra para pintar las patas. Y ya puestos, como el minio ha sido solo  un refilón, le doy también al aro de la base.


Como hace sol, hoy toca limpieza de terrazas: quitar el verdín, rascar el musgo… Hasta mi piso llega un olor a jabón perfumado.


Mientras se seca mi jardinera en andas, veo que los cielos vuelven a cubrirse. Espero que no llueva para estropear mi obra. Aún tengo que darle la segunda mano…

A las 18 h.  Hoy, mis compañeros del patio arreglan una bicicleta.

A las 19.45 h. He pintado el retrato de Paloma (mi regalo de cumpleaños, porque monetarios creo que no voy a poder hacerlos en muuucho tiempo...).


A las 20 h. Aplausos. Hasta me parece que hubiera luces en la grúa y creo oír un cohete. Cuando me asomo, huele a tabaco. Una linterna se mueve de un lado a otro en las torres blancas. Yo, enciendo la mía (acabo de cambiarle la pila) y me muevo al ritmo de un CD de Henry Mancini que tengo puesto. Deslumbrados, o atraídos, dos pajarines casi se me meten en el salón. Me dan un susto…

Sábado, 21 de marzo. Primera semana de enclaustramiento


Cuando abro la ventana, oigo toses debajo de mí. Espero que no sea el  corona

Menos mal que me había cortado el pelo antes de empezar todo esto, porque lo tenía ya imposible. Si no, hubiera acabado dándome tijeretazos… También ruego porque no se me encarne la uña del dedo gordo. Porque el podólogo no es urgente…, salvo que lo sea y tengas un dolor increíble en un dedo, que tú mismo no puedas solucionar…

Esta vez, cuando voy por Cisneros a comprar el pan, sobre las 9. 30 h, un furgón policial para ante una señora mayor que subía, relajada, con un vaso de café para llevar, y sin nada más. Le oí decir, dubitativa: “Es que voy al banco ese…, el que está…”.  “En Magallanes, Jesús de Monasterio…”- le apuntaba el policía. Y ya no sé más porque me metí en la panadería.

Cuando iba a pagar la compra en el Lupa de Cisneros, la cajera estaba contando que a ella le había parado un policía y, cuando iba a sacar su acreditación, de repente, le dice: “Ah no, que llevas camisa “lupera”… (el uniforme del supermercado). Decía que hoy no iba a llorar, porque el día anterior había tenido un caso de indisciplina de un señor hasta el insulto, que le había dejado fatal.

A las 10 h estaba en casa y llamé a mi madre. Le noté la voz un poco triste y casi se me echa a llorar: “Me noto, de espíritu, mal. Me siento angustiada”… Lleva sin salir de  casa, para nada, desde el miércoles pasado (11 de marzo) y, aunque salga al balcón y se mantenga activa, el encierro empieza a pasarle factura. Le digo que hoy que hace bueno salga a la farmacia o a comprar el pan. Con eso es suficiente para ir tirando.

A las 12 h suenan las campanas. Veo, por fin,  a mi vecino del 5º, del 31, el que tiende siempre todas las bayetas a orearse. Es un chico joven. En el 1º del 31, dos niños juegan en el balcón y, mi vecino del 3º, ha desplegado incluso la sombrilla y está leyendo el periódico. Por su parte, en el patio del 27, siguen con su colada inacabable. Además de las zapatillas de deporte y la ropa de cama, han lavado los cepillos. Como sigamos muchos más días confinados, vamos a tener los hogares como los chorros del oro…


Hoy, Día Internacional de los Bosques, como no se puede salir a plantar un árbol, decido contribuir poniendo unas semillas de manzana en mi jardinera vertical, junto a las caléndulas. A ver si prenden...


Por la tarde. El mantra “Quédate en casa” aparece en todas las televisiones, en una esquinita de la pantalla. También en los periódicos locales. No sé cómo había un señor en Galicia que no había oído hablar del enclaustramiento…




20 h. Hoy, además de una especie de cuernos “de elefante”, en el momento “aplauso”, he oído por primera vez, las sirenas de la policía. Me imagino que irían por la calle principal, quizá hasta Valdecilla (el hospital). La gente se está viniendo arriba y enciende y apaga luces, pone las de Navidad…; cualquier cosa que le visibilice y atestigüe que él/ella también está ahí…

Constantemente vemos iniciativas de “Cómo puedo ayudar yo” (cada uno según sus capacidades y habilidades). De qué manera puedo contribuir con mi saber o mi buen hacer. Compartiendo conocimiento y experiencia práctica.

En UNATE, la universidad de mayores (www.unate.org), han creado la iniciativa “Mi ventana”,  pidiendo aportaciones y ayudar con la experiencia


¡Cómo van alargando los días!…En cuanto cambien la hora, la semana que viene, va a ser mágico…

Domingo, 22 de marzo de 2020

Los balcones y terrazas, que solían estar infrautilizados o usados puntualmente para actividades prácticas (tender la ropa, fundamentalmente), se llenan ahora de vida. También las buhardillas (estos días, cuando he salido a aplaudir, he visto gente en sus mansardas, por encima del canalón.


En cuanto a los patios, nunca me había fijado con tanta atención: son una mina y revelan cómo es cada un@: ordenad@, amante de las plantas o de la limpieza más absoluta. Sin duda, los campeones son los del patio de los baldes y las sillas de plástico. Tienen una caseta, como la de las herramientas, donde guardan las bicis.




¿Qué pensarán palomas y gaviotas de tanto silencio, de tan poca gente por la calle? ¿Una ciudad fantasma…? Ellas, vuelan de un lado a otro y se posan en las esquinas, o en los balcones, a mirar.



Hoy, al preguntarle al quiosquero qué tal están todos en su familia, me ha dicho que su mujer es de riesgo y que le tocaba empezar una nueva sesión de quimio. Llamarán antes, a ver…

LEÍDO ESTOS DÍAS

https://www.eldiariomontanes.es/cantabria/viaje-super-necesidad-20200319200430-ntvo.html. Viaje al súper, la necesidad de comprar... o dar un paseo.

https://cincodias.elpais.com/cincodias/2020/03/17/fortunas/1584461937_537220.html. Por qué se agota el papel higiénico en el mundo con el coronavirus.


https://www.eldiario.es/theguardian/Escribe-mantente-habitantes-Hubei-confinamiento_0_1006500161.html. Escribe, pide ayuda, mantente activo: consejos desde China contra la ansiedad derivada del confinamiento.

https://www.eldiariomontanes.es/santander/vida-traslada-balcones-20200319175751-nt.html. La vida se traslada a balcones y ventanales.

https://sevilla.abc.es/cultura/libros/sevi-editorial-sevillana-publicara-libro-relatos-espanoles-sobre-confinamiento-coronavirus-202003191449_noticia.html. Una editorial sevillana publicará un libro con los relatos de los españoles sobre el confinamiento por el coronavirus.

https://www.eldiario.es/tecnologia/Milanuncios-anuncios-alquiler-confinamiento-material_0_1007549606.html. Milanuncios prohíbe los anuncios de alquiler de perros para burlar el confinamiento.

https://www.eldiario.es/internacional/Baltimore-poblacion-hospitales-pacientes-coronavirus_0_1007549646.htmlBaltimore pide a su población que cesen los tiroteos porque necesita las camas de hospitales para pacientes con coronavirus

Actividades un domingo de confinamiento sobre las 13 h

Desde mi balcón veo a gente:

-       Coser al sol.
-       Mirar al móvil.
-       Fumar.
-       Pasar el cepillo.
-       Tirar la colilla por el balcón sobre el tejado corrugado.
-       Apretar a un muñeco de goma que hace ruido.
-       Hablar de balcón a balcón en la azotea.

Poco después de que el presidente del gobierno dijera que estaremos confinados dos semanas más, hasta el 11 de abril, hubo una discusión de patio a costa de la música alta: “- ¡Usted haga su vida, señora…!”.

Como no seamos todos un poco más respetuosos y tolerantes, no quiero ni pensar lo que va a ser esto…

Sobre las 18.30 h

Un niño hace el amago de tirar un avión de papel varias veces, sin tirarlo.


No me había dado cuenta antes pero, en el patio, hay un montón de “casetos”.




El pantalón de deporte del del 5º (el de los paños de cocina) se va a momificar: ya lleva dos días secándose…

A las 20 h. Esto es como el “asalto a la reja”… Los aplausos empiezan,  unos pocos, algo antes de la hora, tímidamente. En el momento de más intensidad, los pajarines huyen asustados (esta vez han tirado hasta un cohete…). En el balcón de la azotea, han puesto globos de colores. Yo me comunico con la linterna de las torres blancas.



Ya pronto, a las 8, será de día. El próximo fin de semana se cambia la hora... 

Lunes, 23 de marzo. ¡A por la segunda semana…!



8h. Ahora mismo un estornino se carcajea de mí desde una antena de tv. “Yo puedo salir y tú, nóo”. Hasta envidio a la grúa, que se mueve, parsimoniosa, de un lado a otro…


A las 9 h me pongo frente a La 2 para hacer la gimnasia que recomendaban, “Muévete en casa”, con el monitor de fitness de OT, Cesc Escolá (nunca lo había visto antes)…Pero este chico es un espídico…Que lo paren, por favor…Fui a todo correr a por la toalla, la silla (una banqueta) y la botella de agua (¡vaya!, no tengo; pues cojo una de vino - la que dejaron mis amigas de la cocina en la última comida de febrero). Luego, intento seguirle el ritmo, pero no hay manera. Me recordaba mis clases de Gymjazz en la Complutense, cuando era veinteañera, en las que – cada vez que conseguía cogerle el tranquillo a algún ejercicio- cambiaban a otro…Creo que la culpa la tienen las clases de psicomotricidad en mi infancia (movernos al ritmo de un pandero, en círculo, por la clase…). En fin, creo que conseguí hacer unas cuantas sentadillas, algún ejercicio de brazos y un poco de suelo. Mañana me pasaré a Eva Nasarre…


LEÍDO ESTOS DÍAS

https://www.eldiario.es/sociedad/cuarentena-afectar-podemos-medidas-evitarlo_0_1007899996.html. La cuarentena puede afectar a la salud mental, pero podemos tomar medidas para evitarlo.

https://www.eldiariomontanes.es/sociedad/salud/estudio-sanidad-revela-20200323174841-ntrc.html. Un estudio de Sanidad revela que el virus sí diferencia por sexos en España.


"P. ¿Pero entonces se transmite por el aire?

R. Hay dos maneras en las que los virus se pueden transmiten por el aire:

1) "Gotillas": que echamos al estornudar o al toser. Viajan algunos metros, pero la fuerza de la gravedad acaba llevándolas al suelo o a alguna superficie.

2) "Aerosoles": cuando las gotillas son tan pequeñas que pueden quedarse flotando en el aire durante horas. Así se transmite el virus del sarampión, el más contagioso que conocemos.

El nuevo coronavirus se transmite en las gotillas, pero parece que no se queda en el aire flotando como aerosol". 

Hoy he aprendido cómo se hace una vídeo-llamada por WhatsApp y también a enviar relatos por mensajes de voz. Me ha ayudado mi sobrino Víctor.

El mensaje de voz. Marcando a quien se lo vas a enviar, en el micrófono (dentro del círculo verde. No es una planta…) que aparece a la derecha de la cámara de fotos y del clip. Si es corto, lo pulsas mientras lo dices. Si es largo, deslizas el dedo hacia arriba del micro para que se quede pulsado por el tiempo que tú quieras. Cuando termines, da al triángulo de enviar; NO a cancelar (porque se borra todo…).

Vídeo-llamada por Wásap. Pulsas en la persona a quien quieres llamar por wásap, y arriba, junto a un teléfono descolgado y tres puntitos verticales, aparece una cámara. La pulsas y ya estás llamando.

Ahora, soy lectora para otros a través de “mensajes de voz”…Igual se convierte en mi nuevo trabajo, anulados mis talleres de escritura presenciales...

Un ejemplo:

Al venir de Coviran, veo salir vapor de mi piscina. ¡Claro!, las labores y funciones han de seguir aunque no haya clientes…

Con este día tan bueno (el cielo todo despejado), da una pena estar en casa…A mí, cuando sale el sol, me llama con los nudillos a la ventana…

Los vecinos de la música alta, ahora sin música, pintan su patio en color rosa pálido, o malva.


Acaba de pasar una mariposa, de las negras, blancas y rojas.

Por fin descolgaron el pantalón corto: era negro y lo ha recogido gris…


Sobre las 16 h salgo al balcón con la banqueta, mirando el sol, ya en el oeste. Todos los días hay que darse “un baño de sol” de 20 minutos, según los expertos.


En el alero del 31 hay un montón de palomas. No dejan de cruzar de un lado a otro: flap, flap, flap.

Sobre las 16.30 h ya deja de dar el sol en mi balcón. Sopla un nordeste suave.

En la tele, los del tiempo, siempre hablan, generalizando, de Madrid para abajo:  “Lluvias y mal tiempo”…Y en Cantabria y el norte, un sol…

A las 20 h: Los gritos de un niño en mi patio: “¡Vamos, Santander!..., ¡Vivan los médicos!”…, “¡Y mañana, mássss!



Martes, 24 de marzo. 6.30 h

Otro día supermaravilloso de primavera. Incluso me parece que huele a mar…Se oyen pajarines piando, aunque no los veo.


Hoy, en el patio recién pintado, un montón de bicicletas para arreglar. Desde luego, no se aburren, no.


Me fijo en las plantas que la gente tiene en sus terrazas, patios o balcones. Esto sí que es mindfulness, atención plena…


Sobre las 12 h. El niño sigue haciendo amagos con su avión de papel, que nunca tira.

Como me angustiaba ponerme a quitar papeles del suelo (solo tiraba uno o dos y, el resto, los volvía a guardar, en otro montón…), he decidido ponerme con las carpetas y separadores del cajón de la mesa de estudio - algo pequeño y abarcable-, a ver si hay más suerte… No está mal: he conseguido reducir casi en la mitad el volumen y ahora tengo más sitio…¡Ojalá, al final del confinamiento, consiguiera dejar mi casa como una celda monacal…!


¡Dios mío! Cuánta ropa lava la pareja joven del 27…Por el contrario, mi vecino del 5º del 31, es totalmente ascético: una prenda cada vez que, luego, aparece colgada, solitaria, en el balcón. Ahora, un pantalón vaquero.


En este confinamiento, nos convertimos en el patio de una corrala: se hacen las actividades en el patio, se habla o se escucha música en el patio…

Las plantas de mis vecinos


Muchas tendría que preguntarlas, porque no estoy segura. Creo que sí puedo afirmarlo de las Cintas (he leído que son muy populares, fáciles de cultivar y poco exigentes), las Echeverias (que no son cactus -carecen de espinas-, sino plantas suculentas, carnosas, de gran resistencia), las Calas, por supuesto, que conozco desde mi infancia y que se incluía en el ramo a la virgen por mayo, los Cactus (nunca me han gustado las plantas pinchudas, aunque es verdad que el Cactario del Jardín Botánico de Cap Roig, en la Costa Brava, era impresionante) y mis Caléndulas, que estoy esperando a que broten. Y no hay que olvidarse, aunque hayan surgido por generación espontánea, de los helechos del canalón…


Como no veo bien desde tan lejos (y tampoco es que reconozca muchas), es posible que exista alguna Aspidistra (“No hay planta de más fácil cultivo y mayor resistencia”- leo en mi libro). Recuerdo ahora que George Orwell tituló uno de sus libros Dejad crecer la aspidistra (en España se tradujo como Que no muera la aspidistra), porque era una planta muy común que todos los ingleses tenían en sus casas. Y quizá, aloe verapotos (muy resistentes), cordilines o  kentias.


LEÍDO ESTOS DÍAS

https://www.eldiariomontanes.es/cantabria/aumentan-denuncias-santander-20200323183610-nt.html. La cuarentena dispara las denuncias entre vecinos en Santander por la música y los ruidos. Denuncias por “ruidos en viviendas”: gente con la tele demasiado alta o fiestas celebradas por la noche o de madrugada dentro de viviendas, «por molestias de ruidos y/o música en tono elevado, perturbando el descanso de la vecindad».

Miércoles, 25 de marzo


Hoy, otro día magnificus…encerrados…

Desde ayer (a ver si se oye desde mi casa…No), el Ayuntamiento de Santander, tras los aplausos de las 20 h, “pincha”  el Resistiré del Dúo Dinámico. https://www.eldiariomontanes.es/santander/resistencia-sonora-20200324214015-nt.html. Resistiré.

8. 30 h. Los martillos “trepanadores de calle” no dejan de funcionar (parece que hicieran una resonancia magnética al asfalto…).

El estornino de la antena de tv ha vuelto y se está espulgando; se sacude, salta de una varilla a otra o se queda contemplando el panorama. Recuerdo que mi sobrino Víctor, de pequeño, decía que el estornino era un 1 y el mirlo un 2 (era lo que le parecía su silueta en el libro de pájaros…).

Juraría que han barrido las colillas del tejadillo corrugado…

Sobre las 10.30 h, el tiempo comenzó a “achucharse”. El cielo se llena de nubes o una especie de niebla. El niño de los aviones de papel, hoy lleva uno en cada mano y se pasea con ellos, pero no los tira.

16.30 h. Me alegro de tener doble cristal en las ventanas. ¿Por qué la gente no entiende que la música que a ellas les gusta puede que no guste a otros y, sobre todo, tan alta…? Y si tiene un ritmo machacón más que melodía…

19 h. Mientras la bebé de la pareja joven anda en el tacataca, los mayores juegan a las cartas. El niño de los aviones de papel hace “carreras” en su patio minúsculo, con un perro que ladra excitado, un adulto y otro niño más pequeño.

19.55 h. A las ocho menos cinco empiezan a oírse las sirenas de la policía/bomberos…Los pajarines no saben qué hacer y cruzan de un lado a otro, despavoridos. Resuena la” trompa de elefante” en mi patio… "¡Las trompetas del Apocalipsis!"- grita uno. Ya casi de noche, los chicos jóvenes, con tirantes y gomas, hacen ejercicio como descosidos en su minipatio.

Jueves, 26 de marzo

“El humor y el amor es nuestra mejor receta…", como dice el actor Dani Rovira en su mensaje en el que confiesa que tiene cáncer.

7.30 h. El estornino guasón está de nuevo en la antena. Le he dedicado un dibujo en mi taller de pintura "virtual" de ayer.



9.30 h. ¡Por fin! han arreglado la cinta transportadora hasta Cisneros…

14 h. Un niño juega con un gato frente  a la ventana en el edificio de enfrente. Es la primera vez que lo veo.

Hoy ha sido un día anodino en el patio: es como si la vida hubiera huido. ¿El frío…?

18.45 h. El niño del avión de papel, incansable, traza círculos y no se marea. ¿Qué soñará?... ¿Que es un gran piloto y traslada a sus pasajeros a países lejanos…? ¿Que hace exitosos aterrizajes de emergencia…?

20 h. Hoy se oye hasta el retumbar de tambores, como una charanga, o aporrean un pandero…Alguien se ha comprado un silbato que imita el canto de los pájaros…

LEÍDO ESTOS DÍAS


https://www.eldiariomontanes.es/cantabria/guardia-civil-policias-20200325133904-nt.html. Guardia Civil y policía pusieron ayer 765 sanciones a ciudadanos que se saltaron el estado de alarma.

https://www.eldiariomontanes.es/sociedad/salud/casos-activos-clave-20200325185824-ntrc.html. Los casos activos, la clave para que baje la curva del coronavirus.

Viernes, 27 de marzo



8 h. Brilla el sol. La silla de playa del 3º del 27 nos da esperanzas de que “habrá verano” y, en algún momento, podremos ir a la playa a bañarnos.



El descansillo, el ascensor y el portal huelen de nuevo a lejía…, que mata. Han puesto un cartel a  la entrada/salida del ascensor, con todas las precauciones que hay que tomar.

12 h. Hoy he visto a un señor “amo de casa” tendiendo la ropa en el 27.


15.30 h. Veo los brazos de una niña en camiseta tomando el sol en la ventana. En otros balcones y terrazas, hacen lo propio. En uno de los minipatios han colocado mesa y sillas para comer al aire libre.

19.50 h. El "momento" aplausos cada vez empieza antes. A las 8 menos 10 ya se oyen las sirenas de los coches de policía. Hoy, en mi patio, huele a carne a la brasa. ¿Estará alguien haciendo una barbacoa para asar unas chuletitas...?

Por un momento parece que estoy en la peli Cuando ruge la marabunta, con el hombre que avisaba de que venían las hormigas soplando un "cuerno de la abundancia".

Sábado 28 de marzo

Cuando me asomo a las 6.45 h, ya hay un estornino con su sonido chirriante posado en la antena de tv. No descansan...



El día ha amanecido despejado, si bien en el horizonte se ven unas nubes/niebla oscuras. Se avecina un "invierno en abril" a partir del domingo...


10.50 h. Ya se va perdiendo hasta la vergüenza: el señor “amo de casa” sale al balcón con sus calzoncillos de rayas...

11.30 h. En uno de los minipatios una pareja joven se pega una paliza haciendo gimnasia: abdominales, banco…¿Serán remeros…?

Yo, me pongo a pintar los barrotes de mi balcón, sin minio (no tengo) ni nada: solo los limpio con un paño húmedo; ni siquiera los lijo antes. Total: Están que se caen… ¡A ver cuando nos toca la fachada a los de la parte de atrás! Que hace ya 20 años de la anterior reforma…


12.30 h. Un niño y una niña se saludan por los balcones y una señora hace punto con los pies descalzos, “descalza de pie y pierna”.

20 h La bocina parece una sirena de barco en la niebla. Cada vez hay más ventanas encendidas, y nos comunicamos: a las linternas de las “torres blancas” se suman ahora las de la calle ¿Calvo Sotelo…?


Antes y después de la hora, muchos se quedan un rato acodados en los balcones, mirando. Mañana, con el cambio de hora, nos veremos las caras…

Domingo, 29 de marzo


Hoy sí que a las 9.30 h -cuando salgo a comprar el pan y el periódico-, se ve vacía la ciudad: paseantes de perros y poco más.

Cuando vuelvo, en las obras cercanas a casa, veo a dos operarios. Como a partir de mañana, lunes, se suspenden todos los servicios no esenciales, imagino que -con el fin de semana por delante sin trabajar- igual ha quedado alguna cosa importante pendiente…

11 h. El silencio es total en el patio. ¿Será por el cambio de hora...?

12 h. La pareja de los ejercicios aeróbicos no perdona ni el domingo: brincan, saltan, levantan pesas…

Hoy descubro a una abuelita en el patio de las macetas “en línea”. Le pasa el plumero al muro de separación. Yo, me dedico a blanquear con el rodillo, hasta donde llego, la pared de salida al balcón (antes de que vengan las lluvias...). 



14 horas. Los niños de mis vecinos de bloque deben saltar a la comba en el piso (de madera), o corren por el pasillo con el perro ladrando (Claro, como son niñossss!!!). Otras veces oigo una mecedora balanceándose furiosamente adelante y atrás, sin descanso. No soporto los ruidos monótonos y repetitivos. Me ponen de los nervios…

15.30 h. La luz empieza a bajar: se vuelve tenue, y comienza a chirimirear. ¡Se acabó lo bueno…! Hasta el jueves por lo menos, según mi móvil, no veremos el sol… ¡Viva la mantita…! Voy a hacer una tarta de queso.


20 h. Hoy los aplausos son viéndonos las caras. El niño de los “Vivas” tiene ataque de verborrea y lanza cada día un discurso digno de una clase de oratoria.

Como decía hoy en la prensa la filósofa Victoria Camps, constituimos  una “comunidad emotiva”...


Lunes, 30 de marzo. 3ª semana de confinamiento


Yo cuento por semanas naturales, de lunes a viernes, aunque llevemos algún día más encerrados…

A las 7.40 h, cuando estoy fotografiando el “Mordor” de hoy, empieza a caer una…El diluvio...Hoy, trabajo indoor: pintar zócalos, ordenar libros, papeles, carpetas...¡Bufff! Y a pintar, por la tarde. ¡Biennnn!

Con lo de la suspensión de los servicios no esenciales, las “trepanaciones” de las 8 h ya no se oyen, pero la grúa frente a mí, se mueve.  Supongo que será dentro de la moratoria de 24 horas para terminar cosas urgentes y dejar aseguradas las obras…

https://www.eldiariomontanes.es/santander/obras-tardan-parar-20200402201908-ntvo.html. Obras que tardan en parar en Santander. El proyecto de 66 viviendas en la calle Alta y los trabajos del Pasaje de Peña.

A las 9.50 h, ¡toma granizada! Hoy dan de 5 a 7 grados y un 80 % de lluvia.

11h. Cambio de planes. Me llama mi hermana desde Torrelavega: la ciática de mi madre ya es insoportable. Le digo que voy en cuanto organice un poco todo y coma, para no darles trabajo extra.

Cojo el bus de las 14 h y tras llamar a urgencias explicando todas sus circunstancias, a las 17 h estamos allí.

Mientras espero en el coche -no me dejan estar en la sala de espera-. cuando escampa salgo a fotografiar las plantas alrededor y, cuando llueve, me pongo a dibujar a lápiz sobre el volante (menos mal que tuve la idea de traerme el cuaderno y fotos para copiar…).


A las 19 h ya he hecho tres retratos a lápiz y he oído el tren pasar varias veces. A las 19.15 h nos dan el alta, con medicación y la advertencia de que si no se le pasa en 10 días, acudamos a la unidad del dolor.

Martes, 31 de marzo. En Torrelavega

5 grados a las 9.55 h. Cuando salgo a tirar la basura y comprar algunas cosas, los pajarines pían en el parque mientras la naturaleza bulle.¡ Qué envidia!...


Por la ventana del salón de casa de mis padres, veo una señora con mascarilla sentada en un banco. ¡Con el frío y la humedad que hace…!


18 h. Como cada tarde,  y aprovechando que he traído mis acuarelas “de viaje” , me pongo a colorear uno de los retratos que hice el día anterior en el coche.


20 h. Salimos a aplaudir. Una señora toca la pandereta y otra aporrea un cazo. Yo saco una tapa inoxidable y la golpeo con una cuchara de madera.


Miércoles, 1 de abril


14 grados a las 12.15 h. Cuando salgo a tirar los cristales y a la farmacia (a por árnica para mi madre), hace sol y todo está en flor. Saco unas cuantas fotos a los alcorques en mi camino a y desde la farmacia. Reconozco la bolsa de pastor, las margaritas, el diente de león y la flor “de los grillos”.


Por la tarde, me dedico a colorear los retratos que hice en el coche a lápiz: intento aplicar los colores complementarios, como me dijo mi profesora: por eso, uno parece que tenga una mascarilla verde de arcilla y el otro parece un personaje de los Simpson...